Si Madonna es la reina madre del pop, Cher la emperatriz, Beyoncé la nueva diva de la música y Miley Cyrus ha conseguido arrebatar a Lady Gaga el puesto como zumbada oficial del top ten… Sin lugar a dudas, hay que decir que Katy Perry es el clown por excelencia de la música pop.
Tras ponerse algo más trascendente y profunda de la mano de Aya Tanimura en el anterior videoclip de ‘Prism’, en esta ocasión, la Perry vuelve a demostrar que es una de las cantantes más desvergonzadas del pop y que tiene un don -el don- especial para hacernos reir.
Cólores neón, pelucas decoradas con sellos de discotecas, arcaicos brackets de piedras preciosas, esclavos que oscilan entre Papa Pitufo y Avatar, hechizos con sabor a piruleta de fresa… Todo resulta tan absurdo que nos negamos a creer que no sea intencionado. Bueno, y de fondo música, claro, un tema muy Perry, con un pequeño guiño al ‘Work Bitch’ de Britney y con el gusto de la estadounidense porque cada tema suyo suene a algo parecido a la épica.